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<DIV>MUCHO OJO:</DIV>
<DIV><FONT size=4>Sábado movido</FONT></DIV>
<DIV class=bajada-nota></DIV>
<DIV class=autor-nota-i>Por: Fernando Vivas</DIV>
<DIV class=meta>Lunes 1 de Marzo del 2010</DIV>
<DIV class=meta><A
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<DIV class="nota-contenido left span-13">
<P class=bajada>
<P>La catástrofe del vecino es la advertencia para uno mismo. Si nuestro propio
7,9 en Pisco no nos remeció lo suficiente como para invertir en un gran sistema
de alertas, prevenciones y control de daños, caray, presionemos para que el 8,8
chileno ayude.</P>
<P>La televisión confirmó que no es parte sustancial, como debiera, de ese
sistema nacional. Los canales, unos mejor que otros, improvisaron noticieros que
se colgaron, por largos ratos, de la señal de TV Chile. Ello no está mal, a
falta de corresponsales, pero además de dar cuenta de lo que pasaba en Chile e
indagar por la suerte de la colonia peruana, había que procesar las amenazas
locales de tsunami y dar, con prudencia, los datos alarmantes sobre el retiro
del mar en varios puntos de la costa, incluida la playa Makaha en la Costa
Verde.</P>
<P>El sábado no solo nos enteramos de que Chile había sufrido un cataclismo,
sino que aquí, donde podríamos temblar hoy mismo, ni siquiera hay un protocolo
establecido, con pasos claros y cargos específicos, para que la televisión y el
Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) coordinen la orientación inmediata
que debe recibir la población tras un terremoto en el Pacífico.</P>
<P>Estar a expensas de las contradictorias llamadas del público (cuando sucedió
el terremoto de Pisco, la llamada de un exagerado pucallpino, hizo especular que
el epicentro había sido en la Amazonía) genera desinformación y pánico. Lo
deseable es que cada noticiero, de inmediato y con rigor, enlace con los
especialistas en función (no con sismólogos que pueden ser brillantes pero
quizás estén ajenos al sistema de alertas) para que nos orienten y nos hagan
sentir que hay un Estado funcionando para que la calamidad se evite o se
atenúe.</P>
<P>No critico la cobertura en sí, pues suele ser esforzada (los enviados
especiales viajan a como dé lugar), atenta al ángulo nacional, humana y hasta
creativa, pero la colaboración y coordinación con el sistema de Defensa Civil da
miedo.</P></DIV></FONT></BODY></HTML>