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<DIV><SPAN class=caps>FABIEN</SPAN> <SPAN class=caps>COUSTEAU</SPAN> Y LA <SPAN
class=caps>SEGURIDAD</SPAN> <SPAN class=caps>ALIMENTARIA</SPAN></DIV>
<DIV><FONT size=4>El heredero de los mares y el ruido de un sopapo</FONT></DIV>
<DIV class=bajada-nota></DIV>
<DIV class=autor-nota-i>Por: Martha Meier M Q </DIV>
<DIV class=autor-nota-i>mmeier@comercio.com.pe</DIV>
<DIV class=meta>Domingo 17 de Octubre del 2010</DIV>
<DIV class=meta><A
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<DIV class="nota-contenido left span-13">
<P class=bajada>
<P>“Planta un pez” intenta incentivar a la población y a los gobiernos a
recuperar la vida en mares y ríos depredados, garantizando así la seguridad
alimentaria. Se trata de una iniciativa global, sin fines de lucro, impulsada
por Fabien Cousteau, economista ambiental de la Universidad de Boston y nieto
mayor del mítico oceanógrafo, buzo y documentalista francés Jacques Yves
Cousteau (1910-1997).</P>
<P>Entre sus principales metas está comprometer a la comunidad con los ambientes
naturales acuáticos circundantes. “Es simple: nuestras acciones cotidianas
tienen consecuencias”, ha dicho este cuarentón que empezó a bucear a los 4 años
y fue criado como pez en el agua por una familia absolutamente marítima y cuyo
patriarca reveló al mundo los más grandes secretos de los océanos, así como su
fragilidad. </P>
<P>Fabien estuvo de paso por nuestro país y fue uno de los ponentes de la
Tercera Reunión de <SPAN class=caps>APEC</SPAN> de los Océanos y Pesca
Sostenible, que congregó a 21 ministros de diferentes países. El evento empezó
–por desgracia– el 10 de octubre, es decir al día siguiente del sonado supuesto
sopapo presidencial. Así las cosas, la reunión realizada en Paracas, la
presencia de Fabien Cousteau, su disertación sobre el manejo sostenible de los
mares y el impacto del cambio climático sobre los océanos pasaron inadvertidos.
Y es que en este terruño eso no es noticia: no hay escándalo, no hay audio
ilegal, no hay mentira, montaje ni intromisión en la intimidad. Horror de
horrores, hay ideas y propuestas claras. ¿Y eso a quién cuernos le importa en
estos tiempos de decrépita decadencia, verdad?</P>
<P>Aquí estamos escribiendo sobre un hombre educado, inteligente, exitoso, que
se codea con las máximas autoridades y empresarios del globo, en el afán de
contagiarles su entusiasmo por conservar los mares y con ello la principal
fuente de proteínas del planeta. Un señor que puede aportar mucho a un país
pesquero como el nuestro. ¿Ni drogas ni desnudos ni hijas que matan a sus
madres? Aburridísimo, pues.</P>
<P>Aquí la noticia, lo importante, lo que se resalta y toma por ejemplar es a un
fracasado que insulta al presidente de la República, le menta la madre en una
institución pública y después sale a gemir, cual gatita, que usaba “su libertad
de opinión”. Perú que le dicen, donde el empobrecimiento de las ideas, los
buenos modales y el bien común son asuntos pasados de moda.</P>
<P>El estruendo de la virtual bofetada, mediáticamente amplificado para
deshilachar al presidente García, no permitió que escuchásemos a Cousteau
recordarnos la inmensa riqueza del mar peruano y la necesidad de su
conservación, a través del aprovechamiento que garanticen alimento a las
presentes y futuras generaciones, y el sano equilibrio del ciclo natural de los
océanos y de sus variadas y hermosas especies. </P>
<P>Este integrante de la tercera generación de la familia Cousteau viene
afinando una propuesta de políticas públicas y privadas en la que la “disciplina
ambiental” es la base de soluciones innovadoras y de econegocios que logran
hacer rentable la conservación. Así se hizo en Sudáfrica con el temible gran
tiburón blanco, antes desollado para venderlo al peso en los mercados. Hoy
proliferan los paseos de avistamiento y en el balance de los lugareños está
claro que más se gana con el escualo vivito y coleando.</P>
<P>El economista ambiental sostiene que la humanidad debe comprender que
“nuestra salud y bienestar como especie está ligada a la adecuada administración
de los ecosistemas marinos”, los cuales cubren 73% de la Tierra. Una de sus
mayores preocupaciones es legarles un planeta saludable a las nuevas
generaciones, en ese sentido trabaja incesantemente para empoderar a los jóvenes
en temas vinculados al agua, a los mares y a la protección de la naturaleza.
Como integrante de la <U>Alianza para la Innovación del Agua</U> (<SPAN
class=caps>WIA</SPAN>, por sus siglas en inglés) es una verdadera pulga en la
oreja de los empresarios y ejecutivos relacionados con los negocios del líquido
elemento para que adopten decisiones más informadas, tecnologías adecuadas y por
tanto compatibles con la conservación y mejor uso del invalorable recurso.</P>
<P>La visita de Fabien Cousteau resulta de trascendencia, tomando en cuenta que
los sectores vinculados con la pesca representarán este año aproximadamente el
31% del <SPAN class=caps>PBI</SPAN> de nuestro país. Tomar en cuenta su
invocación para que protejamos nuestro mar y aprovechemos racionalmente sus
recursos hubiera resultado más valioso que lo dicho por un insultador de
pasadizo. Pero para qué hacer hígado, tomando en cuenta que los titulares sobre
la brillante conferencia dictada por el ex vicepresidente estadounidense Al Gore
en torno a los retos que nos plantea el cambio climático coincidieron en que “le
gustó mucho la comida peruana”. Que Dios nos coja confesados, caray.</P>
<P><STRONG></STRONG> </P></DIV></FONT></BODY></HTML>