[OANNES Foro] Artículo: Corrupción en el Sector Pesquero

[salomón manzur]

Corrupción en el Sector Pesquero (I)
Según el diccionario de la Real Academia de la Lengua (RAE), el verbo "corromper" significa alterar y trastocar la forma de algo, echar a perder, depravar, dañar, pudrir, sobornar a alguien con dádivas.  Por su parte, "cohecho" es el delito consistente en sobornar a un juez o a un funcionario en el ejercicio de sus funciones o en la aceptación del soborno.
Estas definiciones grafican la conducta de algunos empresarios en el sector pesquero del Perú.  Numerosos son los actos fuera de la ley que fueron perpetrados por estos para obtener beneficios indebidos.
Un ejemplo es la Resolución Ministerial 329-1991-VE, ratificada en la Ley de pesca 25977, que prohibió terminantemente el incremento de capacidad de bodega de embarcaciones destinadas a la pesca industrial, así como ampliaciones y/o nuevas licencias para las fábricas de harina y aceite de pescado.
Sin embargo, la norma es letra muerta.  El inventario del año 1991 fue de 92,000 metros cúbicos contra 230,000 metros en el año 2004.  Es claro observar que en este último periodo se otorgaron nuevos permisos fuera de la ley con la complicidad de las autoridades encargadas.
Sólo el 30% de la materia prima de la industria pesquera de consumo humano indirecto es legal; el otro 70% tiene procedencia ilegal.  De manera que los empresarios que utilizan estos métodos no tienen autoridad moral y menos pretender ser modelo, ni hablar de ética.
La Asociación Nacional de Pymes y Medianas Empresas Pesqueras de Consumo Humano Directo (Pympez) y el Zar Anticorrupción dieron inicio a una investigación sobre esta denuncia.  Sospechosamente el gobierno desactivó en 2003 la Comisión Nacional Anticorrupción y todo quedó en nada.
Otro acto vergonzoso es la construcción ilegal de más de 600 nuevas embarcaciones de madera en la zona de Sechura (Bayóvar), conocidas como "vikingos", que realizaron pesca negra y venta ilegal de miles de toneladas de anchovetas en agravio del Estado y resultaron competencia desleal contra la industria formal.  El Estado peruano, lejos de sancionarlos, "premió" a estos infractores legalizándolos, olvidándose de las ingentes cantidades de toneladas de anchoveta vendidas evadiendo la ley y defraudando al Fisco.
Los "premiados" tuvieron tanta suerte que, además, se les ha otorgado mayores beneficios dentro del DS 1084-2008-Produce con la asignación de cuotas pesqueras transferibles, tomando como criterio técnico para la asignación el 60% de la mejor temporada que pudieran haber tenido, mientras que los empresarios que cumplen con las leyes y las cargas tributarias, se les considera sólo el 40% del promedio de pesca histórica.
Pero eso no es todo, hay otro grupo de pesqueros afectados.  Ellos hicieron inversiones en plantas industriales que cuentan con la licencia otorgada por el Estado, pero, increíblemente, nunca se les tomó en cuenta y quedaron al margen de las cuotas.  Ahora esas plantas no son viables porque el precio de la materia prima cuesta tres veces más en manos del oligopolio.  En la actualidad, muchos de los armadores “premiados” transfieren temporalmente o alquilan y negocian las cuotas individuales, obteniendo ingresos mayores a los 3 ó 4 millones de dólares, sentados en su casa, sin trabajar.
Estos actos de corrupción deben cesar y quienes resulten responsables, recibir sanción.  No puede ser que los grandes perdedores sean quienes cumplen con la ley mientras quienes lo desacatan resulten ganadores.  La impunidad debe acabar.
 		 	   		  
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