[OANNES Foro] Artículo: Las Cuotas Pesqueras (2)

[salomón manzur]

Diario “La Razón” – Jueves, 11 de agosto de 2011
Las Cuotas Pesqueras (2)
Cuando salió el Decreto Legislativo 1084, llamada Ley de Cuotas, muchos dijeron que la “pesca negra”, es decir la captura ilegal de anchoveta que no se informa a las autoridades, iba a ser erradicada gracias a esa norma.  Tres años después, quienes hacían ese tipo de actividades han encontrado nuevas formas de camuflaje, dejando mal parados a los auspiciadores del dispositivo dado por el gobierno aprista en junio del 2008.La modalidad es simple, pero no por eso menos perniciosa.  Las naves descargan cientos de toneladas de anchoveta que luego son destinadas a las fábricas sin declarar la totalidad de la carga.  Como es obvio, los infractores producen más harina de pesca y, a fin de ocultar sus malas artes para procurarse materia prima, arguyen que sus ratios de producción se han optimizado.  Po lo normal, una tonelada de harina se obtiene con cuatro toneladas y media de anchoveta, pero los transgresores dicen que utilizan menos de cuatro, debido a la “optimización de sus procesos”, algo falso, por supuesto.Este es otro de los puntos negativos del D.L. 1084 que se suma a los otros cuestionamientos comentados en la anterior columna, como el alquiler de las “cuotas”, que ha creado un mercado desigual y la quiebra de las empresas que no tenían flota propia con la consiguiente pérdida de cientos de puestos de trabajo.El aspecto medioambiental tampoco está salvaguardado.  El océano sigue contaminándose en las diversas etapas del proceso productivo de la pesca industrial.  El atentado contra el ecosistema empieza desde el momento mismo de la captura y se extiende a lo largo del transporte inapropiado (enormes bodegas) a fábricas y la propia descarga.  Los peces se descomponen debido a que la mayoría de las naves no tiene equipos apropiados de conservación y los que tienen no lo usan por aprovechar el espacio y cargar más pescado.  Mediante el sistema de bombeo, arrojan la sanguaza (sangre putrefacta mezclada con agua) al mar, lo cual daña al medio ambiente.  Si esta sanguaza fuera refrigerada debidamente, se convertiría en una valiosa sustancia nutriente.La bahía de Chimbote está pagando, por ejemplo, las consecuencias de la manera poco sanitaria con que se traslada y se manipula la carga.  Las autoridades deberían exigir que todas las naves de pesca tengan sistema de refrigeración como requisito indispensable para operar.  El D.L. 1084 requiere de muchas modificaciones, medidas fiscales adicionales y mayor efectividad en las regulaciones y controles pesqueros a través de las entidades correspondientes.  Las auditorías periódicas a la recepción de materia prima y la producción de harina son importantes para disminuir la “pesca negra” con participación de auditores de reconocido prestigio.Es necesario revisar exhaustivamente el dispositivo, evaluar los costos y beneficios en estos tres años, porque no se puede continuar con una fórmula que tiene poco de transparente, de equitativa y es lesiva para el recurso anchoveta (sardina peruana) y decenas de empresas pesqueras y hasta para el propio medio ambiente.Existen aún otros aspectos que analizaremos próximamente para hacer propuestas encaminadas a contribuir a la mejora del sistema de pesca de consumo humano indirecto en el Perú.
 		 	   		  
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