[OANNES Foro] Artículo "Faenón en la pesca en medio de un mar movido con olor a anchoveta en mal estado"

[salomón manzur]

Diario “La Razón” – Lunes,
26 de marzo de 2012

Sr. Víctor Castañeda

 

Parte I

Faenón en la pesca en medio
de un mar movido con olor a anchoveta en mal estado 

 

Mucho dinero de por medio, corrupción, influencia, poder, intrigas  y hasta un “rey de las medidas cautelares”.

 

La llamada Ley de Cuotas Pesqueras, Decreto Legislativo 1084, está
convertida en la panacea para muy pocos y la muerte empresarial para muchos.

 

Hay un verdadero “faenón” multimillonario en la pesca de anchoveta, en
medio de un mar movido por la corrupción, complicidad, influencia, poder y
hasta por un conocido “Rey de las medidas cautelares”, al cual también
consideran en el sector como “dueño” del mar, del Palacio de Justicia y hasta
del hipódromo de Monterrico, porque es propietario de un stud con 40 caballos
de carrera (tema que será ampliado en nota próxima).

 

Los empresarios pesqueros Salomón Manzur Salgado, presidente de la Asociación
Nacional de Pymes y Medianas Empresas Pesqueras de Consumo Humano Directo
(PYMPEZ), y Marco Petrozzi Woll, pequeño empresario pesquero, representante de
Conservas Carolina y de una PYME industrial de fabricación de harina de pescado
de alto contenido proteico (04 TM/H), en Chimbote, ayudaron a LA RAZÓN a
desenredar el cordel para “pescar” toneladas de acciones putrefactas,
irregulares, en la que se depreda un mar rico en anchoveta, incluso hasta hacer
desaparecer algunas especies marinas como el robalo, lenguado y corvina, o
acaso alguien encuentra en el mercado estos pescados que hasta hace poco eran
tan familiares en nuestra mesa.  “¿No es
acaso una vergüenza que el Perú, un país pesquero, esté importando pescado de
Chile y los restaurantes cinco tenedores tengan que traer pescado de china para
sus cartas diarias?”, pregunta Manzur.

 

Como van las cosas en el mar, el Ministerio de la Producción no pone orden
ni mano firme, el ministro sabe mucho de cooperativismo pero nada de pesca, todo
ello contribuye a la desaparición, y ya está en camino, de la anchoveta,
principal alimento de todas las especies marinas existentes.  Hay mucho desconocimiento del tema o,
simplemente, complicidad.

 

Pero lo cierto es que la anchoveta está en estado de emergencia, según lo
considera el presidente de PYMPEZ. 
Manzur explica que antes de la Ley de Cuotas, expedida en el 2008,
existían dos tipos de empresas industriales de harina de pescado:  las empresas con plantas de harina con flota
propia y las empresas con plantas de harina sin flota que compraba la materia
prima de los armadores pesqueros independientes a un precio promedio de US$ 90
por tonelada métrica, lo que les permitía tener una operación económica
positiva y desenvolverse en el negocio.  Es
importante indicar que el costo promedio de extraer del mar una tonelada de
anchoveta en ese año era de aproximadamente US$ 55 x TM, lo cual significa que
el armador obtenía una utilidad aproximada del 60%.  Poco antes de que salga esta ley, siete
grupos empresariales pesqueros grandes, al parecer con información privilegiada
de lo que se venía, empezaron a comprar las embarcaciones pesqueras
anchoveteras con mejor récord de pesca y se hicieron de la mayor flota de entre
100 y 800 TM de capacidad de bodega.

 

Por ello se quedan con la mayor cuota y encima siguen comprando a los
armadores independientes.  Entonces, las
fábricas de harina que contaban con poca flota o sin flota tenían que competir
por la pesca de los pocos armadores independientes que quedan y los precios se
dispararon a más de US$ 290 por tonelada, con lo cual dichas plantas no
pudieron sobrevivir, ya que los costos de producción con una materia prima tan
cara los sacó del mercado.  Muchas
quebraron y nadie se ha preocupado por ellas, muchos trabajadores fueron
despedidos y los empresarios lo perdieron todo.

 

En cambio, los siete del poder con una gran flota propia, con costos de
extracción bajísimos, salen a comprar a los independientes a precios altos y al
transformarla en harina de pescado hacen un negocio altamente rentable.  Ahora no quedan fábricas de harina de pescado
sin flota.  Se ha beneficiado a los
grandes grupos de poder pesquero, creándose un oligopolio pesquero,
contraviniendo la Constitución del Estado, que lo prohíbe.

 

Pero el Estado nuevamente quiere hacer leña del árbol caído y ha publicado
normas que sacan del negocio de la harina de pescado a las pocas empresas
harineras sin flota (pymes harineras) que pudieron sobrevivir procesando
residuos y descartes de las plantas de pescado de consumo humano directo
(conserveras, congeladoras, seco, salado, etc.), que es a la única materia
prima a la que podían acceder.

 

Manzur denuncia que lamentable y misteriosamente en el 2006 se gesta un
nuevo faenón pesquero.  Aparece una
empresa de la industria de recolección de residuos sólidos, aduciendo que tenía
autorización de recolectar residuos y descartes hidrobiológicos, y obligan al
viceministro de pesquería a dictar medidas por las cuales ingresaban al sector
pesquero  para convertirse en lo que son
hoy plantas de harina de pescado, pese a que las autorizaciones para plantas de
harina estaban cerradas, y con un amplio acceso a la materia prima de residuos
y descartes.

 

También logran que el Ministerio de la Producción de un plumazo (DS
005-2011-PRODUCE) quite la posibilidad a las plantitas de harina de pescado, de
menos de 10TM/H de capacidad de procesamiento, que puedan seguir operando.  El mismo ente rector de la pesquería, que
debería apoyar a las empresas del sector y considerar la inclusión empresarial,
las ataca y les quita la posibilidad de seguir trabajando.
Salomon Manzur SalgadoNext 401*5744scmanzur en hotmail.com 		 	   		  
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