[OANNES Foro] =?utf-8?Q?Petr=C3=B3leo=2C_ecolog=C3=ADa_?=y pesca coexistiendo en el mar

Lun Mayo 20 11:14:26 PDT 2013

Amigos de Oannes.

Cuando Jacques Cousteau inicio la exploración de los mares a bordo del Calipso y filmo películas y documentales que lograron abrir el gran libro del mar a los ojos de cientos de miles de legos, siempre estuvieron tras sus espaldas los intereses estratégicos de Francia, primero la armada francesa sobre la que se apoyo el Grupo de Estudios y de Investigaciones Submarinas (GERS), y luego la Campañas Oceanográficas Francesas (COF) que fueron el armador del Calipso, una asociación sin fines de lucro y encargadas de dar todo el aparato financiero del trabajo del este icónico navío. El Calipso, fue un barco dotado además de los equipos básicos para la exploración oceanográfica, con equipos tan singulares como lectores de reflexión acústica, equipos de topografía, geofísica, física y química y geología; muy útiles para la exploración petrolera submarina.  

La mayoría de las expediciones de Cousteau con el Calipso, no hubieran sido posibles si no hubiera existido un aporte financiero importante de la industria petrolera y gasífera, que contrataba al barco para diversos estudios, y los viajes eran complementados con otros aportes y otros planes para estudios oceanográficos, de otras instituciones con presupuestos menores, incluyendo a la Fundación Cousteau, que se financio con los aportes de la US Divers Corporation, nacida de la patente del regulador de aire, invento que permitió el buceo con aire comprimido.

De la misma forma, muchísimas entidades de investigación marina, oceanográfica y de acuicultura marina, están financiadas por grandes conglomerados financieros soportados por la industria del petróleo, en Bélgica, Italia, Holanda, Estados Unidos, Brasil, y los Países Nórdicos, por solo poner algunos ejemplos. Este modelo ha funcionado muy bien a lo largo de la historia y lo mucho o poco que sabemos sobre el mar, se lo debemos en gran parte a los aportes de la industria del petróleo.

La industria petrolera, desde hace muchos años que es absolutamente consciente de su impacto en el medioambiente, de la misma forma que es consciente que el petróleo se acabara tarde o temprano. Y esto hace que los empresarios involucrados en esta industria, busquen como es lógico, alternativas para su subsistencia futura. Un gran ejemplo, son algunos países del Golfo Pérsico, donde las inversiones inmobiliarias y en el turismo, se han desarrollado como una opción fundamental para la sustentabilidad de la riqueza generada, permitiendo que el petróleo influya en su desarrollo de manera positiva, mientras dure. Cuando el petróleo se acabe, tendrán una actividad económica rentable de la cual subsistir.

En el Golfo de México, muchas empresas petroleras han desarrollado proyectos de maricultura, basándose en infraestructuras abandonadas en el mar por la industria petrolera debido al agotamiento de algunos pozos. Los resultados de estos emprendimientos han sido motivo de muchos artículos (en ingles) que muestran la viabilidad de estos proyectos y le dicen claramente a la industria petrolera que les conviene cuidar el medio ambiente, ya que en el futuro cuando el petróleo se agote, muchos de los activos petroleros podrían ser reconvertidos en la maricultura con una muy interesante rentabilidad y relativa baja inversión.  

El oponerse a la exploración de la industria petrolera en el mar, sin medir las consecuencias y no analizar con frialdad las conveniencias y posibles sinergias, significa tener una muy corta visión de futuro.  

Los peruanos tenemos todo el derecho de defender nuestra soberanía, nuestro mar y nuestra pesca, pero debemos ser mas inteligentes a la hora de negociar con las grandes empresas. Antes que pelearnos con ellas y negar “a priori” su intervención, debemos identificar las oportunidades y saber vender nuestro futuro junto con las formas de cooperación para que este futuro signifique realmente un beneficio mutuo.  

Antes que ser facilistas y oponerse, por que la rebeldía suena bien. Quizá valdría la pena ponerse a pensar, ¿en que proyectos podría invertir la industria petrolera que puedan ser útiles para dominar nuestro mar?, usando pobladores costeros peruanos como parte principal de mano de obra o técnicos especializados, para generar puestos de trabajo. ¿Que proyectos de investigación, podrían ser interesantes para usar el “know how” petrolero y crear una sinergia con las ciencias del medio ambiente y el desarrollo de la maricultura en el Perú? ¿En qué proyectos podrían invertir para prevenir desastres petroleros y/o compensar daños? Y así, con un poco de imaginación, pueden crearse sinergias con una industria que necesita nuestro petróleo, pero también debe pasar por caja.

Las compensaciones de la industria petrolera tienen que pensarse siempre en función a las conveniencias mutuas, pero comprendiendo la complejidad de su actividad, sus fines y sus proyecciones, tanto como las proyecciones de desarrollo de la población costera peruana. No permitamos negociaciones que solo signifiquen “baratijas”, como las que Colon pretendía dar a los nativos americanos a cambio de oro y plata. Es obvio que la industria petrolera mueve grandes capitales, igual que cualquier empresa minera. Lo que tenemos que lograr es incorporar a sus presupuestos proyectos viables, de beneficio mutuo, con visión de futuro.

Una “baratija” común por ejemplo, puede ser una negociación con un gremio de pescadores, que busca un local comunal, que la empresa petrolera construye y como regalo adicional le pone maquinas computadoras. Nosotros no hablamos de eso.

Hablamos de un listado de proyectos visionarios. Mencionemos solo un ejemplo: Estudiar la chita, para conocer sus periodos de reproducción, sus preferencias de hábitat, su tamaño mínimo para la captura, hábitos alimenticios, etc. Que nos permitan mantener la sustentabilidad de esa pesquería y proyectarse a su cultivo, con desarrollos piloto de tecnología de cultivo transferible a cero costo. En el futuro la misma empresa petrolera puede descubrir que la inversión que hizo en la investigación del recurso fue interesante y podrían invertir ellos mismos en un emprendimiento de maricultura basado en esa especie, con el consiguiente desarrollo de la industria, generación de puestos de trabajo y mantenimiento de la sustentabilidad del recurso en el tiempo, gracias a su crianza en cautiverio.

Eso obviamente significa cambiar por completo nuestra visión sobre la intervención de las compañías petroleras en el mar peruano, ellas deberán adaptar sus inversiones a nuestras necesidades de desarrollo, abriéndose a si mismos una opción de sustentabilidad futura de su riqueza, que asegure un verdadero beneficio mutuo para la comunidad costera y el inversionista.

Cordialmente.

Francisco J. Miranda Avalos
Presidente de la Junta Directiva

OANNES, Señor de las Olas.
Foro Hispano Americano de Intercambio de Información sobre Temas de Mar
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